Somos un grupo de mujeres que participamos casi en todo lo que nos sale, vamos a los ordenadores, a la escuela de adultos, hacemos trabajos de manualidades, vamos de excursión, hacemos teatro, hace un año hicimos un cursillo de tapices, otro de la memoria y de conservas, y en todo he ido encontrando unas bellísimas personas que poquito a poco hemos conseguido una gran amistad que será para siempre.
Yo que no soy de este pueblo de Montefrío, jamás pensé que encontraría tanta amistad y cariño.
Caí enferma y me vi entre la vida y la muerte. Se por mi familia que casi el pueblo estuvo pendiente de todo, se volcaron, no tengo palabras para agradecer tanto cariño y amistad.
Yo os tengo en mi corazón y jamás me olvidaré de esta amistad que me habéis demostrado.
En estas ocasiones se ven las amigas que tienes.
Ahora me encuentro muy feliz, he podido recuperarme del todo y doy a Dios gracias por darme otra oportunidad y a seguir luchando hasta que Dios quiera.
La vida si lo piensas y sabes aceptarla como viene, es bonita, lucha por ella.
María Romero Quintana
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